23/7/08


....Que hice!
Ni aun recogiendo los pedazos de entendimiento regados por doquier compondría una respuesta lógica a tal pregunta
Ciega y obnubilada, presa de la más pura oscuridad, no hubo duda alguna en ese preciso instante, quizás el único momento en toda una vida en que la duda no tuvo prioridad alguna.

Camine lentos y escasos pasos que me separaban de el, sigilosa cual fiera al acecho de su presa, me detuve unos segundos, segundos en los cuales no hubo pensamiento ni razón demandante
Ahora que todo ya paso, que no hay vuelta atrás, es cuando puedo ver que fue lo que sucedió, tanto veneno corrió por mis venas, en un solo segundo erosiono con cuanto sentido de razón había en mi, una sola idea, un solo pensamiento y una inequívoca acción como resultado.

En el lento descenso sus ojos estuvieron puestos en mí, aquella misma mirada de siempre que ahora se desvanecía perdiéndose tras un difuso e inentendible .....- Porque?
Sus manos alcanzaron a tomarse de mis brazos y a presionar sobre mi piel, su tacto frió y un tanto húmedo, su rostro cubierto del rojo latiente de su sangre, sus expresiones de dolor y de profunda confusión.

Al estar frente a esa visión de mi victima desfalleciente, fue cuando logre establecer contacto con mi conciencia y la duda comenzó a nacer, ¿ acaso será que el golpe no fue suficiente, tal vez la energía emanada de mi cerebro no fue suficiente para que mis manos entendieran cual era la violencia necesaria? o ¿todo se debía a que la intención verdadera era verlo desgarrarse en el sufrimiento espantoso de ir sintiendo su propia muerte segundo tras segundo?

Ya nada importaba, dentro de mi el regocijo era ilimitado, todo fue hecho sin planificación alguna, la mas pura reacción inconsciente removiéndose en mi sangre como gusano en el húmedo suelo, alimentando mi deseo de compensación.
Mire a mi alrededor y la realidad comenzó a devorar, a distorsionarse y desvanecer, la total confusión se apodero de mi al momento en que los movimientos de mi pecho a causa de la respiración me demostraban la verdadera realidad.
Mi visión mutó convirtiéndose en un oscuro cuarto y la brisa proveniente de aquella insignificante ventana, en crueles segundos me trajo a la realidad con el insondable silencio como compañía.

Miro, ahora mis ropas, ellas están limpias, observo mis manos, blancos de presión estan mis nudillos sujetando el objeto portador de tal quimeraque trae consigon el ineludible espectro de un rumbo, nublando el presente de añejos, pero siempre vivos, flagelos.

3 comentarios:

Anónimo dijo...

La venganza siempre es dulce, la mayoria de las veces no vale la pena ensuciarse las manos, pero hay otras ocasiones, en las que tomar cartas en el asunto y beber del caliz de la muerte es esencial para el descanso eterno de nuestra alma, para acallar las voces que susurran en nuestra cabeza una y otra vez... "la sangre es vida...".

TE AMO.

Dani.. dijo...

"El placer de los Dioses"
Inpactante/relato.

Te dejo mi abrazo.
Dani..

Xaj dijo...

Está todo tan oscuro acá, che.
Abrí las ventanas.

Saluditos.